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Cuautlancingo | Moños elaborados con listón blanco, veladoras y flores fueron colocados en la puerta principal de la parroquia de San Juan Bautista, tomada desde el domingo los fiscales y mayordomos del templo.

Así, vecinos, fieles católicos, piden que regrese a la paz al recinto.

El domingo, el párroco Mario Pérez Pérez pretendía colocar la primera piedra de la capilla de adoración perpetúa al Santísimo Sacramento en la parte de atrás de la parroquia.

Sin embargo, fiscales y mayordomos lo evitaron a golpes, empujones y gritos.

Ante la agresión, el párroco Mario Pérez Pérez denunció lesiones y allanamiento a un inmueble federal, es decir la parroquia de San Juan Bautista.

Actualmente, el templo está a resguardo de fiscales y mayordomos porque quieren que la Arquidiócesis cambie el párroco.

La rebelión no es bien vista por algunos habitantes de Cuautlancingo que han colocado moños blancos en la puerta, veladoras y flores.

Uno de los feligreses expresó: “Yo la verdad no estoy de acuerdo que esté cerrada, porque hay que tener respeto y dignidad, hasta la fe se está perdiendo por lo mismo”.

Mientras tanto, los fiscales aseguraron que están realizando trabajos y mantenimiento a la iglesia, específicamente en la parte superior.