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El gobierno estatal declaró oficialmente al Trueque de San Pedro Cholula como Patrimonio Cultural Intangible del estado de Puebla por sus valores culturales, antropológicos, históricos y artísticos.
Al mismo tiempo, instruyó a la Secretaría de Cultura y al ayuntamiento de San Pedro Cholula, en el ámbito de sus competencias, instrumentar acciones de promoción, preservación y salvaguarda de esta milenaria tradición.
Para asegurar la protección y continuidad de esta manifestación cultural que se desarrolla cada 8 de septiembre en el centro de la ciudad, la administración estatal ordenó a la Secretaría de Cultura coordinar la elaboración --antes de dos años- de un Plan Especial de Salvaguarda.
La declaración del Trueque de San Pedro Cholula como Patrimonio Cultural Intangible del estado de Puebla fue formalizada a través del decreto publicado en el Periódico Oficial este martes 28 de febrero.
En este documento se señala la necesidad de adoptar medidas concretas para salvaguardar las distintas expresiones culturales intangibles que poseen un significado y un valor especial o excepcional que impactan a la sociedad poblana, al formar parte fundamental de su identidad cultural; tal y como sucede con el denominado Trueque de San Pedro Cholula.
La declaración es resultado de una propuesta hecha el 23 de junio de 2021 en el Congreso del estado de Puebla por el entonces diputado local, Abundio Sandre Popoca, vecino de este municipio, quien el 10 de junio de 2022 organizó dos foros de consulta que concluyeron con la aceptación de llevarse a cabo el proceso para declarar al Trueque de San Pedro Cholula como Patrimonio Cultural Intangible del Estado de Puebla.
ANTECEDENTES
Alrededor del año 500 de esta era, Cholula se constituyó como un importante centro ceremonial dedicado a Quetzalcóatl, hasta donde llegaban comerciantes de distintas partes (hasta mil kilómetros de distancia), trayendo diversos productos que intercambiaban en la Gran Plaza, en el área que correspondería al convento de San Gabriel, al actual zócalo y la Plaza de la Concordia.
Cholula era considerada una Ciudad Sagrada dentro del Altiplano Central y una meta obligada de peregrinación, al nivel de Roma para los católicos o la Meca para los musulmanes. Y, esta dinámica de acudir al lugar sagrado no cambió después del período de conquista; esta concurrencia hizo de San Pedro Cholula una ciudad multicultural y un importante centro de intercambio, a tal grado, que se le llegó a conocer como “ciudad mercado”, e incluso uno de sus barrios se llamaba “Tianguismanalco”.
El Trueque de San Pedro Cholula se originó por costumbre, de manera espontánea y sin una organización previa porque vecinos y visitantes acuden puntuales cada ocho de septiembre a realizar el intercambio sin invitación o anuncio previo; en la antesala de otras prácticas culturales, como la gastronomía, las ofrendas del Día de Muertos o la medicina tradicional, al suministrar los productos que les son necesarios y que no pueden encontrarse de manera inmediata en la localidad.
Los productos que se intercambian en el trueque tradicional son: incienso y copal, artesanías de: madera, barro, palma, ámbar, cobre, metales, rafia, cerámica, yeso, tela, piel, piedra, tejido, cestería, bordados; productos de origen criollo como: manzanas, peras, durazno, guayaba, limón, nuez de castilla, vainas, aguacates; cacahuates, chiles, habas, chiles poblanos, chiles locos, guajes; o productos hechos artesanalmente como el pan de fiesta y los dulces típicos, así como las hierbas medicinales, entre otros.
El intercambio suele darse entre bien agrícola por bien agrícola o bien agrícola por artesanía o bien procesado artesanalmente, siempre y cuando exista un acuerdo entre las partes en la equivalencia entre el valor de los productos porque en el Trueque no hay reglas establecidas.
MEDIDAS PARA PRESERVAR EL TRUEQUE DE CHOLULA
En el decreto estatal, se indica que la Secretaría de Cultura del gobierno de Puebla y el ayuntamiento de San Pedro Cholula, Puebla deben asegurar la promoción, preservación y salvaguarda del Trueque como una manifestación cultural intangible.
Las medidas de salvaguardia deben formalizarse en instrumentos jurídicos y/o administrativos para dirigir las acciones a corto, mediano y largo plazo.
Entre las acciones que favorezcan la práctica y transmisión está la organización de concursos infantiles y juveniles sobre el Trueque, desarrollo de jornadas de divulgación sobre su importancia cultural e incluso realización de trueques alternativos.
También se sugiere la renovación urbana de la Plaza de la Concordia y el Portal de Peregrinos, desarrollar listas o inventarios que registren los elementos que forman parte de la manifestación cultural, promover el estudio e investigación de su origen y evolución, crear un fondo documental de acceso público, elaborar un registro anual de los productores-portadores asistentes.
Además, se pide desarrollar instrumentos normativos correspondientes para el uso de la Plaza de la Concordia y el Portal durante el Trueque, constituir un comité vigilante de la tradición del Trueque, habilitación de infraestructura temporal para el desarrollo del Trueque e instalación de servicios sanitarios gratuitos, entre otras medidas.
