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Cuautlancingo | Por un error de mantenimiento, una filtración de agua inundó ayer una zona del nuevo hospital general del IMSS.

El gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina dijo que un empleado dejó abierto un conducto al retirar ceniza volcánica del techo de este edificio, por donde entró el agua de lluvia que llegó hasta los pasillos, después del aguacero de la tarde de ayer.

Al menos esta fue la explicación que dio el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo Aburto durante una llamada que sostuvo el mandatario estatal.

“Esperemos que –en realidad- no sea una falla de construcción”, confió Céspedes Peregrina, tras informar esta mañana sobre el contenido de la llamada con el titular del IMSS.

Y, en breve espera reunirse en persona con la delegada del IMSS, María Aurora Treviño García para obtener una aclaración más detallada, adelantó.

Desde anoche, el IMSS emitió una tarjeta informativa en la que descartó una falla en las tuberías del nuevo hospital general de Cuautlancingo que tiene dos meses de operación y cuya construcción costó al gobierno federal 600 millones de pesos.

“La filtración de agua se relacionó con labores preventivas de limpieza de las tuberías del techo ante la caída del volcán Popocatépetl”.

“El agua fue retirada sin provocar afectaciones a los servicios del hospital, a la seguridad de los derechohabientes ni al equipo médico”, justificó.