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San Pedro Cholula | Esta noche, vecinos impidieron la reactivación del relleno sanitario que se encuentra en los límites de San Andrés Calpan, después que el gobierno estatal y federal determinó que el depósito funciona de manera regular, sin evidencias de contaminación al medio ambiente.
Los pobladores organizados bloquearon la carretera Cholula-Calpan y obligaron a regresar a decenas de camiones llenos de basura –custodiados con la fuerza pública- procedentes de los 21 municipios de la región que contrataron los servicios de la empresa Pro-Faj HidroLimpieza para confinar sus desechos sólidos.
Durante la resistencia que incluye, además, cierres con quema de llantas en el bulevar a Huejotzingo, grupos de habitantes de las comunidades aledañas insisten que la denominada planta recicladora ha afectado severamente los mantos freáticos y los cultivos, con la filtración al suelo de líquidos residuales, por lo que están dispuestos a permanecer indefinidamente con su protesta.
Durante la movilización, integrantes de la Unión de Pueblos y Fraccionamientos contra el Basurero y en Defensa del Agua afirmaron que elementos policiacos o civiles dispararon hasta en 15 ocasiones contra sus compañeros apostados afuera del depósito.
También aseguraron que al menos tres integrantes de su movimiento fueron detenidos y que otros tantos fueron intimidados con cateos en viviendas de San Juan Tlautla.
Antes, dijeron, cerca de las tres de la tarde, sujetos a bordo de motocicletas llegaron a intimidarlos y agredirlos verbalmente mientras permanecían en el plantón.
Los inconformes sostuvieron que en el transcurso de la tarde del martes impidieron hasta en cinco ocasiones el ingreso de camiones llenos de basura, custodiados por policías estatales y municipales como una muestra de que están dispuestos a defender la libre determinación de las comunidades que luchan por su territorio, agua, tierras y vida.
A través de un comunicado, expresaron temor a que su resistencia sea disuelta en cualquier momento con la fuerza pública, reforzada por la Guardia Nacional.
GOBIERNO ESTATAL LLAMA AL DIALOGO A INCONFORMES
Por la tarde, el gobierno estatal informó que sostuvo una segunda reunión con alcaldesas y alcaldes de los 21 municipios afectados por el cierre del relleno sanitario, encuentro en el que se dio a conocer que la clausura que impuso la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) fue atendida y subsanada, por lo que los sellos de la dependencia federal fueron retirados y se permite su operación de manera regular.
En la reunión, se afirmó que el gobierno estatal ha promovido vínculos con los inconformes; sin embargo, la respuesta ha sido negativa; ante ello, por lo que exhortan a los manifestantes a entablar un diálogo abierto y objetivo para lograr acuerdos.
Al mismo tiempo, el gobierno de Puebla sostuvo que el depósito de desechos sólidos tiene permisos municipales y estatales vigentes para funcionar, además de dictámenes emitidos por la CONAGUA, SMADSOT y la BUAP, que avalan que no existe contaminación al medio ambiente, por lo que no hay impedimento legal para su operación.
PROFEPA CONFIRMA QUE RETIRÓ CLAUSURAS AL RELLENO, PERO CON CONDICIONES
Por su parte, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que realizó una visita de inspección al relleno intermunicipal de Cholula, en atención a la denuncia que presentó la Asamblea de Pueblos.
Como resultado, se le impusieron medidas de urgente aplicación, para regularizar la operación y cumplimiento de los requerimientos técnicos que establece la NOM-083-SEMARNAT-2003.
Como la empresa que opera el relleno no cumplió con estas medidas, el pasado 9 de abril se impuso la Clausura Total Temporal.
Para la visita de verificación efectuada el 22 y 23 de abril pasados, la empresa ya había presentado evidencias del cumplimiento de dichas medidas, por lo que se procedió al levantamiento de la clausura; no obstante, se dejaron a salvaguarda otras medidas correctivas adicionales, que consisten en que la macrocelda del relleno cuente con la infraestructura para el manejo adecuado de los lixiviados, la generación de biogás y la rehabilitación del sistema de drenaje pluvial.
Asimismo, la empresa debe realizar un programa de monitoreo que responda a las condiciones particulares del sistema de flujo hidráulico y que permita determinar si hay algún impacto negativo en los mantos freáticos, derivado de la operación del relleno.
Además, la empresa deberá realizar un estudio técnico que determine si el sitio aún tiene vida útil, de acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental presentada en 2015 a la Autoridad Ambiental del Gobierno del estado de Puebla. De no ser el caso, deberá presentar un Plan de Cierre Definitivo de la Macrocelda. Si estas medidas correctivas adicionales se incumplen, se podrá clausurar nuevamente, para lo cual se realizarán las verificaciones correspondientes.
La actuación de la PROFEPA se centra en asegurar que los responsables no causen una afectación mayor a la población de más de 20 municipios, por un inadecuado manejo de los residuos sólidos urbanos que recibe este relleno intermunicipal.